Las "Pequeñas Grandes Historias" son ensayos sobre temas relacionados con la historia, o respuestas a preguntas sobre historia, situadas
en el contexto de la Gran Historia. Este nuevo género de escritura sobre historia fue diseñado en 2007 por la "gran historiadora"
holandesa Esther Quaedackers y su marido Marcel Koonen como una manera de animar a sus estudiantes a pensar a lo grande y de estimular
su pensamiento lateral, ayudándoles a la vez a darse cuenta de la importancia que tiene la Gran Historia en asuntos del día a día.
Al
escribir estas Pequeñas Grandes Historias se pide a cada estudiante que escoja un tema que le interese y que cuente su historia completa,
desde el Big Bang hasta la actualidad, incorporando comparaciones entre diferentes procesos. Un ejemplo del tipo de comparaciones
que se piden puede ser la aparición del Universo y en qué se parece a (o diferencia de) la aparición del tema escogido. Estas comparaciones,
por inusuales, pueden ayudar a aclarar aspectos concretos de ambos procesos, y pueden ser de cualquier tipo siempre y cuando ayuden
al estudiante a explicar el tema de su elección desde el punto de vista de la Gran Historia.
Para escribir estas Pequeñas Grandes
Historias los estudiantes deberían cumplimentar un cuestionario en el que delineen todas las conexiones entre el tema de su elección
y los hitos correspondientes de la Gran Historia. En
este enlace se puede descargar un modelo de cuestionario.
Al hacer esto,
los estudiantes pueden encontrarse con que no todas las conexiones son igual de útiles, pero aun así deberían perseverar, y se les
debe animar a ser lo más creativos que puedan, a pensar lateralmente, para, con un poco de suerte, encontrar ideas originales y útiles.
Las tareas escritas deberían tratar al menos tres conexiones: una conexión de su tema con la historia del Universo, una con
la historia de la vida y una con la historia de la Humanidad. Aunque se imponga un mínimo de tres conexiones, los estudiantes deberían
usar todas las conexiones que les parezcan relevantes. Las instrucciones para escribir una Pequeña Gran Historia se pueden descargar
en
este enlace.
Este tipo de trabajo suele ser difícil de puntuar objetivamente. Por ello, se sugiere usar las siguientes categorías:
-
Contenido (incluyendo valorar hasta qué punto la información contenida en el trabajo es académicamente aceptada y relevante para la
Gran Historia): hasta 6 puntos (sobre 10).
- Estilo (lo bien escrito que está el trabajo): hasta 2 puntos (sobre 10).
- Creatividad:
hasta 2 puntos (sobre 10).
Como estas categorías muchas veces no son fácilmente precisables y son, por lo tanto, discutibles y subjetivas,
es mejor ser generoso con los estudiantes siempre y cuando esté claro que se esforzaron por escribir el trabajo. A lo largo de los
años hemos comprobado que prácticamente todos los alumnos se emocionan escribiendo y presentan trabajos muy buenos, algunos de los
cuales se han podido aprovechar en otros contextos.